lunes, 9 de mayo de 2011

TESTIMONIO DEL ANUNCIANTE: EL ANUNCIADO

Principio del Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios. Como está escrito en Isaías el profeta: He aquí yo envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu camino delante de ti. Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas. Bautizaba Juan en el desierto, y predicaba el bautismo de arrepentimiento para perdón de pecados. Y salían a él toda la provincia de Judea, y todos los de Jerusalén; y eran bautizados por él en el río Jordán, confesando sus pecados. Y Juan estaba vestido de pelo de camello, y tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos; y comía langostas y miel silvestre. Y predicaba, diciendo: Viene tras mí el que es más poderoso que yo, a quien no soy digno de desatar encorvado la correa de su calzado. Yo a la verdad os he bautizado con agua; pero él os bautizará con Espíritu Santo. S.Marcos 1:1-8

   El Evangelio de S. Marcos va directamente al meollo del mensaje. Es el "Principio del evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios" esto es lo que nos vamos a encontrar en este libro. Y el mensajero (Juan el Bautista) nos lo dice. Y el Espíritu Santo inspira a Marcos a escribirlo así. Es una de las cuatro perspectivas del Evangelio. Pero el evangelio no tendría sentido sin el Hijo de Dios Jesucristo. Es mediante El que el evangelio cobra poder "Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación...Romanos 1:16" Sin el trabajo bien hecho de Jesucristo, no es posible el Evangelio.

Es un Evangelio anunciado. El profeta Isaías es citado aquí " Como está escrito en Isaías el profeta: He aquí yo envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu camino delante de ti. Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas." Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas."
Es un Evangelio de limpieza mediante el "giro" del verdadero arrepentimiento. El verdadero Evangelio produce verdadero arrepentimiento en el verdadero seguidor y, por tanto, verdadero perdón de los pecados.

El mensajero que anuncia la venida del Señor, es un mensajero con un testimonio humilde: En su forma de vestir: "Y Juan estaba vestido de pelo de camello, y tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos;" en su forma de comer: "y comía langostas y miel silvestre" y en su forma de presentarse: "Viene tras mí el que es más poderoso que yo, a quien no soy digno de desatar encorvado la correa de su calzado" No se anuncia a sí mismo, anuncia al Señor. Así debe ser cualquier testimonio del Evangelio, quitar la atención de uno mismo y señalar a Jesucristo.

El mensajero, Juan el Bautista, anuncia un bautismo diferente: El bautismo del Espíritu Santo y al que hace posible su recepción: Jesucristo, el Hijo de Dios.

Aquí se nos anuncia la venida de Jesucristo. Pero también se nos enseña a:


1. Dar un mensaje que fue anunciado con antelación y ahora ya cumplido.
2. Señalar claramente la parte que cada persona debe hacer: arrepentirse.
3. Indica a quién debemos mostrar que la gente mire: No a nosotros a Jesucristo.
4. Muestra como debemos ser en estilo de vida y en actuación: Humildes.
5. Nos descubre un bautismo poderoso: Espíritu Santo y fuego.
Gracias Padre, porque nos damos cuenta que haces todas las cosas bien. En tu plan dentro de los tiempos, estaba previsto, como así ocurrió, la venida de Jesucristo y nuestro perdón de los pecados y la liberación del pecado, morando no solo con nosotros, también en nosotros por medio del Espíritu Santo, ayúdanos a comprender plenamente el evangelio y a compartirlo fielmente, señalando al Señor Jesucristo y dándote toda la gloria a Ti. Amén.

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