sábado, 25 de enero de 2020

EL MEJOR SITIO PARA ESTAR II

INVOCANDO EL NOMBRE DE DIOS

 
En la primera parte, veíamos que Dios en la creación nos puso en el mejor lugar y con la mejor compañía: EL MISMO.

    Después de de la expulsión de Adán y Eva del Huerto del Edén, y luego con dos de los hijos de Adán y Eva, Caín y Abel, encontramos que el "comer del fruto prohibido", es decir, del árbol del bien y del mal, recayó sobre la humanidad una responsabilidad mas amplia de la que tuvieron  Adán y Eva en el Huerto del Edén, la cual consistía solamente en no comer de un solo árbol de los muchos que había.

    Al comer de este árbol, el libre albedrío de la humanidad ya no solo consistía en comer o no comer de un árbol, desde entonces tendrían que tomar sus decisiones basándose en ese conocimiento del bien y del mal, como vemos que le dice Dios a Caín:
Resultado de imagen de caín y abelSi hicieras lo bueno, podrías andar con la frente en alto. Pero si haces lo malo, el pecado te acecha, como una fiera lista para atraparte. No obstante, tú puedes dominarlo.» "Génesis 4:7 NVI"

    En el caso de Caín y Abel, encontramos la mala elección de Caín, primero al no ofrecer el holocausto adecuado a Dios y después el dejarse llevar por el mal de su corazón a causa de la reprensión de Dios y el haber considerado bien la ofrenda de su hermano Abel, por parte de Dios, en su furia, mató a Abel.

    El castigo que recibe Caín incluía estar FUERA DE LA PRESENCIA DE DIOS,...
Si me expulsas hoy de sobre la faz de la tierra, de tu presencia estaré oculto, seré errante y fugitivo en la tierra y sucederá que cualquiera que me encuentre, me matará. "Génesis 4:14 BTX3"
 Así Caín se alejó de la presencia del Señor y se fue a vivir a la región llamada Nod,[k] al este del Edén. "Génesis 4:16 NVI 1999"

    Caín y su descendencia, no fueron precisamente un ejemplo de virtudes, de ella nace la poligamia:
Y tomó Lamec para sí dos mujeres: el nombre de la primera era Ada, y el nombre de la segunda, Zila. "Génesis 4:19 BTX3"
    Y no solo la poligamia, puede deducirse que la violencia continuaba siendo una forma heredada en Lamec, fuese por asesinato o defensa propia.

     Después de esto, la Palabra de Dios nos dice que Adán y Eva tuviero un nuevo hijo: Set, el cual así mismo tuvo un hijo de nombre Enós y se dice lo siguiente:
También Set tuvo un hijo, a quien llamó Enós. Desde entonces se comenzó a invocar el nombre del Señor. "Génesis 4:26 NVI 1999"
Resultado de imagen de enos
Enos invocó el Nombre de Dios
      Recalco esto "Entonces se comenzó a invocar el nombre del Señor" es decir se volvió a tener en cuenta la presencia de Dios.

   Esto nos enseña, ya desde el principio de la humanidad, que se puede vivir sin Dios, y se puede vivir con Dios. Esto ha ocurrido y ocurre de forma continuada desde entonces.

   En el capítulo 5 se recoge la descendencia de Adán y es curioso que no dice nada de Caín, solo habla de Set y de su descendencia, una descendencia, por cierto de la cual nació Noé, quien fue el único que halló gracia ante los ojos de Dios Gen. 6:8.

   De esto último deducimos que desde Set se había invocado el Nombre de Dios, o dicho de otra manera se había tenido relación con Él, por lo cual, aunque de forma diferente al Huerto del Edén, la presencia de Dios había estado con toda esa generación hasta Noe, y Noe estaba en la presencia de Dios, gracias a esa generación que se mantuvo invocando el Nombre de Dios.

   Esto fue primordial para la continuidad de Adam (ser humano, humanidad) como veremos en la siguiente parte, pues ya su padre predijo sobre el nombre de Noe:
Le dio ese nombre(Noe) porque dijo: «Este niño nos dará descanso en nuestra tarea y penosos trabajos, en esta tierra que maldijo el Señor.» "Génesis 5:29 NVI 1999"
   Padre celestial, ¡cuán importante es tu presencia! queremos ser de la generación que escoge tu presencia en nuestra vida, gracias por esta gracia tan importante e inmerecida, pero nos aferramos a ella y nos damos cuenta de con qué gran amor nos has amado y con qué gran amor quieres conquistar nuestro duro corazón. ¡A Ti sea siempre toda la Gloria! En el Nombre del Señor Jesucristo.

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